6/1/2011

Viajero

En la terminal 1 de Barajas, los viajeros, fugitivos, vienen y van…

Viajero que arrastras las maletas,
te despides de la mujer que amas
y le dedicas palabras de amor
con lágrimas desesperadas.

Viajero que dices un adiós
que odias pronunciar,
viajero que te fundes en abrazos
que ignoras si volverán.

Viajero que abrazas a tu familia
y antes de tornar la esquina
alzas la vista atrás,
y con una sonrisa y un leve suspiro
vuelves a tu caminar…

Viajero que tú solo con tu equipaje
te sientas en una cafetería
bebiendo el café con un aire
de eterna melancolía.

Viajero que esperas impaciente
Sentado en aquella esquina,
con un libro de suspense
o canciones de Sabina.

Viajero que “parlas” italiano
con un tono melodioso,
y tu movimiento de la mano
característico y sinuoso.

Viajero con ojos brillantes
y un fugaz temblor en las manos,
mirando a saber que horizontes
o qué parajes lejanos.

Viajeros que caminan sonrientes
¡a saber en quien pensarán!
tal vez en sus amadas ardientes
que con besos les esperarán.

Viajeros de ojos rasgados,
o viajeros de piel morena,
viajeros tal vez olvidados,
o viajeros que escriben poemas.

Viajeros que como yo se sientan
a contemplar a las gentes viajeras
y se impregnan del sentimiento
que les corre por las venas...